Todas las novedades sobre nuestros servicios, tecnología y salud
Biblioteca Medismart
Beber bebidas energéticas puede ayudar a recuperar energía o mantenerte despierto para estudiar para un examen, sin embargo, es necesario tomar conciencia de que existen riesgos potenciales para la salud al consumirlas.
Las bebidas energizantes sirven para estimular tu cuerpo, aumentar la resistencia física y mejorar el estado de ánimo. Estas se caracterizan por contener una alta cantidad de azúcar y cafeína. Pueden llegar a ser muy útiles para deportistas gracias a los carbohidratos, sales, vitaminas y minerales que incluyen en sus ingredientes, pero su ingesta cotidiana suele tener muchos riesgos asociados.
Si sufres de hipertensión, alteración del sueño o algún problema de tipo cardiovascular no debes consumir estos líquidos. El consumo habitual de estas bebidas por una persona sin problemas de salud puede tener consecuencias tales como: palpitaciones o taquicardia, presión arterial alta, ansiedad, insomnio, irritabilidad y nerviosismo.
Muchas personas han empezado a consumir este tipo de bebidas a temprana edad, factor que contribuye a generar diversos riesgos en su salud. Algunos efectos por exceso de la dosis recomendada pueden ser convulsiones, infartos, arritmias cardiacas e incluso accidentes cerebrovasculares, es por esto que los consumidores deben ser conscientes de cómo estos bebestibles pueden afectar al organismo.
Por lo general las personas que ingieren estas bebidas no tienen una percepción del riesgo que pueden causar, por lo que podrían consumirlas de forma desmedida en sus rutinas diarias. Tomar una lata de bebida energizante equivale a 3 shot de café expresso con 3 cucharadas de azúcar, por lo tanto, consumir más de una al día puede ser muy peligroso debido al daño acumulativo de la cafeína y el azúcar en esas cantidades.